Veamos porqué el calentamiento profundo de esta técnica genera estos beneficios y nos hace adelgazar:
- Aumenta la circulación sanguínea del tejido graso, mejorando su metabolismo y con ello el flujo para su eliminación, siendo consecuencia la disminución del espesor adiposo y de la celulitis.
- Favorece el drenaje linfático natural del cuerpo. Se eliminan los líquidos y toxinas del área tratada.
- Estimula la formación de nuevo colágeno y elastina en capas internas, reestructurando el tejido subcutáneo y dotándolo de firmeza, lo que se traduce externamente en una piel más firme.
Por tanto, la reducción de volumen de la zona tratada es el resultado de la eliminación metabólica de la grasa, la liberación de líquidos del sistema linfático y la reestructuración de las fibras de los tejidos internos.
La radiofrecuencia puede aplicarse en cualquier parte del cuerpo y con cualquier tipo de piel, desde las negras y bronceadas hasta las más blancas.
Tras cada sesión, puede haber un ligero enrojecimiento de la piel que por lo general se normaliza en minutos. El paciente puede continuar su vida normal, ya que el tratamiento no produce inflamación o daño cutáneo alguno.