El acné es una patología compleja que genera en algunos casos complejos y aislamiento social; pero las cicatrices de acné en algunos pacientes se convierten en marcas de por vida que gracias a los tratamientos actuales pueden atenuarse y en algunos casos eliminarse totalmente.
En Demláser hemos diseñado paquetes de tratamiento muy eficientes para mejorar el aspecto de las cicatrices, ya sean tipo rolling (superficiales), picahielo, queloides (elevadas), pigmentadas tipo manchas o el color violáceo residual en la piel.
Contamos con láser fraccionado semiablativo, láser q-switched, láser vascular Idas, microdermoabrasión, dermapen o microagujas, radiofrecuencia fraccionada, peelings químicos y subincisión, entre otros.
- Este láser trata la piel a través de una matriz de puntos de luz láser que varían en intensidad, dependiendo del tipo de piel, la profundidad de las cicatrices y los resultados del tratamiento deseados.
- La luz del láser actúa en la epidermis y en la dermis calentando la epidermis y el colágeno de la dermis a altas temperaturas. Así se consigue un recambio de la epidermis y una desnaturalización del colágeno antiguo de la arruga en la dermis estimulando la formación de colágeno nuevo de mayor calidad para quitar las cicatrices tratadas.
- Tecnológicamente, este láser para el tratamiento de las cicatrices de acné actúa de forma fraccionada. Es decir, produce columnas de actuación microscópicas en la piel (epidermis y dermis) dejando intacto el tejido entre las columnas. Así, el tejido de las columnas se va a renovar, produciendo un colágeno nuevo y una epidermis más gruesa ayudado por el tejido circundante sano que promueve esta reparación. Se trata de un proceso natural del propio cuerpo reemplazando el colágeno dañado por una piel nueva, sana y brillante con cicatrices menos visibles.
- El tratamiento con láser de CO₂ para el tratamiento de las cicatrices se realiza de acuerdo a cada paciente puesto que el equipo permite seleccionar la potencia con la que se quiere trabajar, la profundidad y el tiempo del pulso para así, actuar en capas superficiales, intermedias y profundas según la necesidad.
- Generalmente, se observa una diferencia significativa en 1 tratamiento. Si se hace más de 1 sesión, en cada sesión los resultados se van acumulando y la mejoría aumenta. Además, al acabar las sesiones, la piel sigue mejorando los próximos 3-6 meses a medida que las células nuevas que se han activado continúan produciendo nuevo colágeno.
- La duración de los resultados tras el tratamiento láser para cicatrices de acné depende del estilo de vida, la edad, el estado y cuidado de la piel de cada persona.
El dermapen es un dispositivo médico que es tendencia en la medicina estética facial que está enfocado en mejorar el aspecto y la textura de la piel. Tiene forma de un lápiz, de ahí su nombre y en el extremo de la punta tiene 12 microagujas que se encargan del tratamiento conocido como micropunción. El Dermapen se encarga de restaurar el colágeno y la elastina de la piel a través de unas microagujas que inyecta en las capas externas de la dermis. Estas agujas son muy finas y apenas perceptibles por el paciente. Al aplicarlas se estimula el colágeno autólogo del paciente y su elastina, lo que hace que se genere un proceso de regeneración de la piel y de rápida curación que ayuda a eliminar las arrugas, manchas, estrías o cicatrices de diversas zonas del cuerpo.
Es un procedimiento médico que está indicado para liberar las cicatrices de acné que se encuentran retraídas posterior al proceso inflamatorio, generalmente producidos en un acné severo.
Se realiza con anestesia local con una aguja lo suficientemente gruesa que pueda liberar las bandas de fibrosis que hace que las cicatrices se vean retraídas o hundidas.
Generalmente, el procedimiento no genera incapacidad funcional, pero sí puede producir hematomas o morados por 5 a 7 días que con una crema a base de caléndula o árnica pueden desvanecerse.